Estoy en una empresa de telecomunicaciones, realiza trabajos para las principales operadoras de telefonía celular de Paraguay. Es un buen trabajo, no me quejo, es un buen refugio. Funciona como un burdel, yo me someto a ellos y ellos me dan protección, gano la parte que me corresponde y los dueños con el mayor porcentaje, buena ubicación, jefes moderadamente abaros, oficio limpio... nada mal.
Mis tarea básica es la administración, catalogamiento y archivado de informes de trabajo. Como hoy en día ya nadie cree en nadie, todo debe tener un respaldo fotográfico y un documento con firma, y allí entro yo para que no esté todo desparramado por aquí y allí.
Como dije, no me quejo de mi trabajo... pero yo tengo un plan maestro que concretar, y no podré realizarlo si sigo dando los días de mi vida para enriquecer a mis señores.
